Todos los jardineros han escuchado que agregar café molido a su abono acelera la descomposición y agrega nitrógeno muy necesario al abono. Pero, ¿qué hay de agregar café molido directamente a la tierra de su jardín? ¿Acidificará el suelo o “quemará” las raíces de las plantas? ¿Los posos de café ayudan a los tomates, los arándanos y otras verduras? ¿Ayudarán a los rododendros y azaleas?
Hay un millón de recomendaciones en línea (literalmente) sobre el uso de café molido para repeler gatos, aumentar los nutrientes del suelo, aumentar las bacterias amigables, atraer lombrices, matar babosas, prevenir malezas, airear el suelo y Dios sabe qué más. Algunos son legítimos, algunos mitos urbanos. También he visto artículos sobre regar tus plantas con restos de café y sus supuestos beneficios (muy sospechosos). Así que pensé que era hora de investigar la ciencia publicada para ver cuál es la realidad sobre el uso de café molido en su jardín.
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¿Debería usar café molido como mantillo o compost?
El café molido en peso contiene aproximadamente un 10 % de proteínas ricas en nitrógeno, que son vitales para la germinación de semillas y el crecimiento de las plantas. Según Linda Chalker-Scott, Horticultora Urbana de Extensión y Profesora Asociada, Centro de Investigación y Extensión Puyallup, Universidad Estatal de Washington, “la proporción de carbono a nitrógeno del café molido puede ser tan baja como 11:1, una proporción ideal para la nutrición de plantas y suelos. Dado que el café se extrae en agua, la mayoría de los compuestos hidrofóbicos, incluidos los aceites, los lípidos, los triglicéridos y los ácidos grasos, permanecen en el suelo, al igual que los carbohidratos insolubles como la celulosa y varios azúcares no digeribles. La lignina estructural, los fenoles protectores y los maravillosos aceites esenciales productores de aroma también quedan del proceso de elaboración. Es este último grupo de sustancias químicas las que tienen propiedades antioxidantes y antimicrobianas.“
La sabiduría común supone que, dado que los posos de café son muy ácidos, reducirán el pH de la tierra, haciéndola más ácida y beneficiosa para las plantas ácidas como los arándanos, los rododendros y las azaleas. ¿Pero es esto cierto? La ciencia no es absolutamente clara al respecto.
En estudios científicos, agregar café molido al compost ha mostrado resultados variados, desde crear un compost terminado levemente ácido de 4.6 hasta un compost alcalino con un pH de 8.4 (!). Cuando se agregaron posos de café compostados directamente al suelo del jardín, los investigadores descubrieron que el pH de los posos en descomposición no era estable. Después de mostrar un aumento inicial en los niveles de acidez, el pH del suelo disminuyó poco después.
Pero los posos de café han mostrado resultados sustancialmente positivos como mantillo en la tierra del jardín. Al igual que con cualquier buen mantillo orgánico, moderan la temperatura y la humedad del suelo. Pero los posos de café también se unen a los residuos de pesticidas y metales pesados tóxicos como el cadmio, evitando su movimiento hacia el medio ambiente circundante (muy beneficioso para mantener estos contaminantes fuera de las vías fluviales locales). También se ha demostrado que los posos de café aumentan la disponibilidad de importantes nutrientes para las plantas, como nitrógeno, fósforo, hierro y zinc.
Se debe tener en cuenta que cada variedad de grano de café contiene diferentes niveles de acidez, lo que se ve afectado aún más por el método de preparación.
¿Debería agregar café molido fresco al suelo del jardín?
Cuando se agrega directamente a la tierra del jardín, las bacterias y los hongos especializados descomponen los posos de café. A medida que se descomponen, se crean sustancias húmicas (componentes químicos y estructurales) que son vitales para la calidad de su suelo. Las lombrices de tierra arrastran los posos de café al suelo y los utilizan como fuente de alimento que mejora la estructura del suelo.
Como se indicó anteriormente, los posos de café contienen un alto porcentaje de nitrógeno, el ingrediente principal para el crecimiento de las plantas. Pero no todas las plantas responden bien a ellos. De hecho, los posos frescos pueden ser venenosos para algunas plantas (lo que se conoce como fitotoxicidad), así que nunca permita que los posos entren en contacto directo con las raíces o los tallos.
Se ha demostrado que los posos de café suprimen la germinación de semillas en muchas plantas e inhiben el crecimiento en otras. Los científicos especulan que esto es el resultado de ciertas sustancias tóxicas liberadas por los posos de café a medida que se descomponen, lo que también podría ser responsable de sus efectos sobre la supresión de malezas. Otros científicos han propuesto que la cafeína es el nutriente que provoca esta actividad alelopática. Para estar seguro, nunca agregue café molido directamente al suelo ni lo use como mantillo donde las semillas están germinando.
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Los posos de café controlan hongos y bacterias.
Los posos de café muestran algunas propiedades notables en la supresión de la pudrición y marchitez por hongos, incluidos Fusarium, Pythium y Sclerotinia. En estudios bajo condiciones controladas en frijoles, pepinos, espinacas y tomates, cuando los posos de café se usaron como parte de una mezcla de compost, mostraron la capacidad de prevenir el establecimiento de ciertos hongos y bacterias patógenos. Ningún estudio hasta ahora muestra una prueba concluyente de su eficacia en la supresión de enfermedades en otros cultivos alimentarios, árboles o arbustos.
Cómo utilizar el café molido de forma segura en tu jardín
- Puede utilizar con seguridad los posos de café hasta un 20 % del volumen total de compost. Más que eso puede ser perjudicial. El veinte por ciento del volumen total es suficiente para la supresión efectiva de enfermedades y para la construcción del suelo, y no debe acidificar su suelo (los niveles de pH varían según el tipo de suelo, los microorganismos presentes, la lluvia, la naturaleza del compost y muchos otros factores).
- Usar granos de café solos como mantillo está bien, pero no los coloque demasiado, ya que se compactan fácilmente y pueden bloquear el intercambio de aire y agua. Lo mejor es usar café molido en combinación con un mantillo orgánico o en capas debajo de un mantillo como astillas de madera para evitar la compactación.
- Los posos de café no acidificarán permanentemente el suelo del jardín como lo hacen la turba o los aditivos a base de azufre; solo afectarán la acidez en el área inmediata a la que se agregan, no en las áreas circundantes más grandes. Mi mejor recomendación es agregar café molido a su compost junto con hojas secas y trituradas y recortes de césped sin pesticidas.
Fuentes: Los posos de café, ¿animarán las plantas? y Uso de posos de café en jardines y paisajes, Linda Chalker-Scott, Ph.D, Extensión de la Universidad del Estado de Washington.